Wild Kids

WARNING WARNING Esta reseña puede contener spoilers, por favor, leed primero el cómic y después la reseña (vamos, lo lógico y normal, pero quien avisa no es traidor...) Vale, ¿lo habéis leído ya? Que empezamos, ¿eh? Ahora sí que sí, ¿eh? Que va... se viene... 3... 2... 1...

En nuestra maravillosa entrevista con Joan C. sobre Okasan nos comentó que tenía un proyecto entre manos que pronto veríamos y ¡¡ese proyecto es Wild Kids!!

Wild Kids es un kodomo, manga para niños, que podemos disfrutar tanto niños como adultos y es que estos personajes tan adorables y aguchables van a plantearnos situaciones que ocurren hoy en día y que tanto niños como adultos no debemos perder de vista. 

El cuidado del medio ambiente, los peligros del cambio climático, las clases sociales, el trabajo en equipo, la tolerancia, la facilidad con que los niños pueden reutilizar objetos y darles nueva vida, incluso se habla de la corrupción. Esta historia tiene de todo.

Sin duda, una obra perfecta para concienciar a nuestros pequeños de los dilemas que la humanidad enfrenta y una bella forma de recordarnos a nosotros que debemos hacer algo ya para detener el deterioro de nuestro planeta.

Esta soy yo a los 7 años con mis amigos en mi pueblo

La historia gira en torno a una familia de conejitos (que me muero de adorabilidad). Bueno... no nos queda claro si son humanos vestidos de animales o animales con forma antropomórfica, porque además no vemos ningún humano como tal en la historia... Objetivamente ¿parecen humanos vestidos con kigurumi de animales que actúan como humanos pero tienen necesidades animales? No está claro, pero tampoco importa porque son perfectos tal cual son (quiero adoptarlos a todos xD)

El caso es que esta familia de conejos deben recolectar zanahorias pues winter is coming, una ardua tarea encomendada al primogénito de la familia, quien, para fastidio suyo y disfrute nuestro, va a ir acompañado por toda su tropa de hermanos pequeños mega adorables. Por el camino vamos a ver cómo le traen de cabeza y al llegar al lugar indicado van a encontrase con más animalitos de distinta especie. Lo que parece un conflicto a primeras va a convertirse en una competición por ver quién consigue más zanahorias, solo para darnos de bruces con la realidad, puesto que a causa de la contaminación ya no hay zanahoria, solo chatarra... 

Así pues, nuestros amiguitos se van con las manos vacías y nosotras con la incertidumbre de qué pasará con ellos cuando llegue el invierno y no tengan zanahorias... sniff sniff 

Joan, dales un final feliz porque estas caritas no deben sufrir

Sara 👽