A ver, lo primero de todo aquí vamos a lanzar un consejito del día para antes de leer este capítulo: tomaros una tilita, o algún tipo de infusión así calmante porque mare mía, la que se ha liado en un momento. Vamos a ir por partes como dijo Jack el destripador jaja soy una genio del humor porque el capítulo abre con un recuerdo mega tierno que hace que hasta le tengamos pena a Thomas... pero tampoco mucho no nos vamos a olvidar ahora de la jarana que ha montado y toda la experimentación con niños. Aun así es muy bonito ver esa época antes de que se convirtiese en el monstruo que es ahora, un recordatorio de que al final estamos lidiando con una persona que anteriormente tuvo una vida, etc. Algo que después va a venir que ni pintado para un contraste muy chulo al final de capítulo.
No me gusta que se peleen, pero al mismo tiempo estoy living con toda esta página |
Lo que no es chulo es el infarto que por poco me da durante el enfrentamiento entre Daniels y Helen. Esto no se hace chicos, que una ya tiene su edad (dramatización activada). La pelea en sí está chulísima, algo que no nos sorprende, pero es que encima mientras se van colando escenas de lo que está ocurriendo en la sala donde intenta curar a Caleb. Hasta que ese giro de página, por ponerlo en palabras simples, se va todo a la putísima mierda. Cosa que nos encanta síí caos, yuju porque con ese balazo acaba de marcar el curso de toda la historia. Y es que si Thomas antes nos parecía un monstruo despiadado cuando todavía tenía algo que proteger, ¿en qué se convertirá ahora que lo ha perdido todo? Desde luego bonito no va a ser...
Estoy yo allí y rompo la barrera del sonido de lo rápido que echo a correr |
Pili 🌙
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